Durante muchos años ejerció su carrera como docente, posteriormente se dedicó a la actividad artística. Ha sido parte del equipo de Cortocinesis desde sus inicios, su apoyo constante y su compañía permanente ha sido fundamental para la vida de los procesos creativos de la compañía.

Ha sido productora de campo en varias oportunidades dentro y fuera del país.

Gracias a su generosidad y su confianza por nuestro trabajo a lo largo de estos años, Cortocinesis hoy cuenta con un espacio físico cultural. Es la madre de Vladimir RodrÍguez , pero también de todo el equipo, es la socia principal del proyecto, del espacio de Cortocinesis.